Principios generales de la Doma Clásica


El objetivo de la Doma Clásica es como educar a un atleta haciendo de su entrenamiento productivo mediante dos factores: la felicidad de lo que está haciendo y el equilibrio. A mi humilde opinión no se trata solo de hacer un mecanismo perfecto sino en un ser confiado, atento y voluntarioso a las órdenes de su jinete, mostrando franqueza y regularidad en los aires, armonia expresada en sus movimientos, una impulsion activa y una aceptacion de la embocadura sin tensión ni resistencia.
Fruto de todo esto es la sensacion de que el caballo lo hace por su propia voluntad, mostrando ligereza, facilidad de movimientos, con una incurvación perfecta en las lineas curvas. Tambien esto se expresa en la regularidad y franqueza de su paso en un trote ágil, regular, activo y en un galope equilibrado.
Mediante la impulsion justa para la realización del ejercicio y la libertad de movimientos, el caballo obedece "a gusto", respondiendo a las ayudas con calma mostrando armonia.
En todo el ejercicio el caballo debe estar "en la mano". Se dice que un caballo está "en la mano" cuando el cuello está más o menos alzado y arqueado de acuerdo a la fase del entrenamiento y la extensión o reunion del aire, y acepta la embocadura con un contacto suave y en completa sumisión. La cabeza debe estar en posicion estable , ligeramente por delante de la vertical con la nuca flexible como punto más prominente y sin ofrecer resistencia alguna al jinete.

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